Soluciona tus problemas vaginales
Las molestias vaginales (mal olor, picor, sequedad, irritación, etc) están causadas por desequilibrios en el pH vaginal.
Los motivos que pueden hacer que el pH vaginal se altere son:
- Antibióticos
- Menopausia
- Estrés
- Menstruación
- Anticonceptivos hormonales
- Exceso de higiene, duchas vaginales, etc
Vaginova equilibra tu pH vaginal eliminando las molestias.
CÁPSULAS VAGINALES PREBIÓTICAS
La vagina es una estructura músculo fibrosa con gran inervación sensitiva, responsable no sólo de placer sino también, en ocasiones, de dolor y/o malestar.
Las molestias vaginales o vaginitis es una de las causas más frecuentes de consulta ginecológica. El bienestar de la vagina depende de un equilibrio de su flora natural que puede verse alterado fácilmente por multitud de factores, como el ciclo menstrual, la menopausia, las relaciones sexuales, los anticonceptivos hormonales, la lactancia, el estres, la temperatura, etc..
RESTAURA EL PH VAGINAL DE FORMA NATURAL
SE UNA MUJER 4,0
La vagina es un órgano con conexión al exterior y por lo tanto, no estéril, está cerca del ano, conducto que tiene bacterias intestinales no adecuadas para la vagina, por ello, la vagina debe tener un sistema de defensa para mantener su salud.
La vagina tiene gran cantidad de bacterias lácticas o lactobacilos que son los responsables de generar un ambiente ligeramente ácido (PH entre 3.5-4.5) en el que proliferan muy bien los lactobacilos y en el que no se encuentran cómodas el resto de bacterias patógenas, que pueden anidar en la vagina creando malestar si esta no mantiene un PH adecuado.
La creación y mantenimiento del ambiente vaginal óptimo, dependerá de la salud de los lactobacilos, responsables de fermentar la lactosa para generar el acido láctico que mantiene el PH en niveles del 3.5-4.5.
Se han identificado más de 20 especies de lactobacilos y cada persona tiene una composición de lactobacilos diferente, además de lactobacilos.
El ácido láctico es el que mantiene la vagina sana por su PH ligeramente ácido.
Los lactobacilos son asimismo los responsables de inhibir el crecimiento de diversos microorganismos patógenos para la vagina, los que pueden provocar el escozor, mal olor y demás incomodidades vaginales.
La situación ideal será pues, tener la mayor cantidad de lactobacilos propios sanos para que puedan fermentar la lactosa y generar ácido láctico manteniendo el PH vaginal entre 3.5 y 4.5 y así evitar el desarrollo de bacterias patógenas.
El pH vaginal entre 3,5 - 4,5 favorece el desarrollo de los lactobacilos a la vez que impide el crecimiento de bacterias patógenas.